domingo, 26 de septiembre de 2010

La vida sin R (A.R)


La primera vez ke terminè con Rod quede totalmente devastado. Sentì ke mi vida se partìa en pedacitos y todo era un delirio de melodrama: no podìa imaginar a nadie màs infelìz que yo ni nadie con una tristeza màs grande que la mìa. Despuès de algunas capitulaciones y con las esperanzas de ke la relaciòn mejorarìa con el tiempo, regresamos…para terminar al mes. Tal vez sòlo necesitabamos una segunda oportunidad para darnos cuenta de ke la relaciòn ya no funcionaba (el menos en este momento de nuestras vidas). Ahora estaba soltero de nuevo pero no sentía que el mundo se me venìa abajo ni que “los golpes como la ira de Dios” de los que hablaba Vallejo arreciaban contra mi sino ke era una situaciòn incòmoda como muchas de las ke pasan a lo largo de la vida. Un domingo, dos dìas depues , en el hippe Sunday matàndome de risa tirado en el pasto con un amigo y luego de haber bailado sin el menos temor al ridìculo comprendì ke eso era tambien la vida sin Rod. Inevitablemente lo extraño en muchos momentos del dìa pero es algo a lo ke me tendre ke acostumbrar como se acostumbra uno a los sìntomas de la gripe y ke eventualmente desaparecen luego de un tiempo (Gracias a Dios!) y ke tengo màs de cien motivos para seguir adelante